Después de dos años en los que no hemos podido reunirnos con nuestros familiares, este año vamos a volver a poder hacerlo.
En mi caso, en Nochebuena y Navidad, siempre nos reunimos con la familia de mi marido en casa de su hermana mayor, porque es la única donde cabemos todos. Nos podemos llegar a juntar más de 25 personas, contando a niños. Ya son tres generaciones las que nos juntamos y eso da para mucho.
En Nochevieja, Año Nuevo y Reyes, seguramente nos iremos a nuestra casa en el pantano de Entrepeñas. Ya en plan tranquilo, pues, seguramente, sólo seremos tres.
Para mí estas fechas son una mezcla de tristeza y alegría. Tristeza porque echo mucho de menos a las personas que ya no están con nosotros. Y de alegría porque es una gozada ver a toda la familia junta y pasándoselo bien.
Al mismo tiempo, no puedo dejar de pensar en todas aquellas personas que no tienen que llevarse a la boca, que tienen frío, que están sufriendo una guerra que ellos no han buscado, que sufren enfermedades que no les permiten disfrutar. Y, algunos de ellos nos dan una gran lección porque sacan sonrisas de los momentos más desesperados y nos enseñan a valorar las cosas pequeñas de todos los días.
Hemos de saber sacar lo mejor en cada momento
Estas fiestas siempre nos las imaginamos con comidas especiales y regadas con buenos vinos y cavas. Esto último no es algo de lo que yo pueda disfrutar mucho, pero confieso que media copita de cava cae todos los años. El médico ya me dio permiso para tomarme una copa de vino a la hora de la comida, que es la que más alejada tengo de la ingesta de medicamentos.
Hemos de saber sacar lo mejor en cada momento. Disfrutar de la vida que nunca sabemos qué fecha de caducidad tiene y procurar no hacer daño a nadie. Es decir, ser buenas personas.
Así que os deseo a todos una feliz navidad y que el 2023 sea ya, por fin, un año en el que empecemos a decir adiós a las pandemias, la guerra y la crisis económica y, en concreto a todo el equipo de mjn-neuro que sigáis con los éxitos y expandiéndoos por el mundo que hacéis mucho bien a las personas con epilepsia. ¡Gracias por todo!