La OMS e importantes instituciones internacionales hacen un llamamiento a los gobiernos y a la sociedad civil para dar prioridad a la epilepsia
La epilepsia es una enfermedad cerebral caracterizada por una actividad eléctrica anormal que provoca convulsiones o comportamientos y sensaciones inusuales, y, a veces, pérdida de conciencia. Tiene consecuencias neurológicas, cognitivas, psicológicas y sociales, y representa una parte importante de la carga mundial de morbilidad. A pesar de la disponibilidad de medicamentos anticomiciales eficaces y de bajo costo, más del 75% de las personas con epilepsia en países de ingresos bajos no tienen acceso al tratamiento.
La OMS junto a importantes organizaciones no gubernamentales que trabajan en el ámbito de la epilepsia: la Liga Internacional contra la Epilepsia y la Oficina Internacional para la Epilepsia han preparado un informe para para animar a los países a que den prioridad a la epilepsia en sus programas de salud pública.
Epilepsia: un imperativo de salud pública es el resultado de un completo informe del impacto de la epilepsia en las personas que la padecen y sus familias, comunidades y sociedades. La epilepsia conlleva un alto riesgo de discapacidad, comorbilidad psiquiátrica, aislamiento social y muerte prematura. En todo el mundo, las personas con epilepsia y sus familias sufren estigmatización y discriminación. Muchos niños con epilepsia no van a la escuela y a los adultos se les niega el trabajo, el derecho a conducir o a casarse. Las violaciones de los derechos humanos que sufren las personas con epilepsia en todo el mundo son inaceptables.
Es hora de que la epilepsia se convierta en un imperativo de salud pública, de fomentar enérgicamente la inversión para reducir su carga y de abogar por acciones que aborden las lagunas existentes en los conocimientos, la atención y la investigación sobre esta enfermedad.
Para darle a la epilepsia un lugar destacado en la agenda de la salud pública mundial es necesaria una acción conjunta. En la resolución de la Asamblea Mundial de la Salud sobre la epilepsia que adoptaron los Estados Miembros se llamó la atención para la necesidad de una acción coordinada a nivel nacional. La resolución es un poderoso instrumento para involucrar a los gobiernos y a la sociedad civil en la adopción de medidas concretas para promover el acceso a la atención y proteger los derechos de las personas con epilepsia.
El informe “Epilepsia: un imperativo de salud pública” es un llamamiento a una acción sostenida y coordinada para asegurar que toda persona con epilepsia tenga acceso a la atención y al tratamiento que necesite, y la oportunidad de vivir sin estigmatización ni discriminación en cualquier parte del mundo.